Contra el cielo

jueves, agosto 25, 2005

Saint-Moritz, 2 agosto
Me aburre el cielo. Algunos momentos, incluso, me hace sufrir. Y entonces no puedo ni siquiera mirarlo, porque no sé cómo vengarme y herirlo. Me siento hermano de los escitas que disparaban sus flechas contra el Sol y las nubes. En suma, para ser franco, al menos conmigo mismo, odio al cielo Y con la peor especie de odio: con el odio impotente.
No es que ame demasiado la Tierra. La Tierra es reducida, sucia, monótona y poblada más de lo necesario por pedacitos de barro parlante que la desfiguran y la hacen todavía más repugnante.
Pero aquí nos sentimos en nuestra casa, dueños de hacer y deshacer, de movernos a nuestro gusto. Tal vez podemos hacernos obedecer de la Tierra. Se consigue reducirla, aquí y allí, como queremos;' obtener grano donde había aguazales o guijarros;' crear ríos artificiales, abatir montañas, separar continentes.
Pero el cielo está distante, lejano, es inmodificable, hostil. No tenemos ningún poder sobre el cielo. Incluso los estratos más bajos de la atmósfera son independientes de nuestro dominio. Es preciso soportar el viento que sopla, esperar el beneplácito de la lluvia, sufrir semanas y meses de serenidad tórrida. No sabemos hacer nada contra la tempestad; todo lo más, conseguimos atraer, de cuando en cuando, algún rayo.
Ni el globo ni el aeroplano han disminuido nuestra impotencia contra el cielo inferior. Podemos correr en el aire, pero estamos de la misma manera a merced de los huracanes, de los tifones, de los tornados, de la niebla. Y apenas conseguimos elevarnos cinco o seis mil metros: siempre por debajo de las montañas más altas.
Pero lo que odio más ferozmente es el cielo superior, el firmamento. Tolero el Sol bestial, con su cara de fuego llena de lunares, a causa de su utilidad; ¡pero la noche, las estrellas! El infinito no me aterroriza; me disgusta y me ofende. Para sufrir la humillación de mi pequeñez bastaba la tierra. La provocación del cielo estrellado es desproporcionada, prepotente, vergonzosa. Aquellos millones de soles que aparecen a mis ojos como átomos desordenados de luz eléctrica, ¿qué tienen que ver conmigo? ¿Qué quieren? ¿Para qué me sirven? ¿Para qué vuelven todas las noches llamas milenarias, a insultar la brevedad de mis días en este ángulo vacío?
El cielo es una injuria perpetua e insoportable. Las estrellas no me conocen y yo no podré nunca hacer nada de ellas ni contra ellas. Cuando he sabido a cuántos millares de años de luz distan de mí, y cuántos siglos emplea su claridad para llegar a la Tierra, no he hecho más que dar forma aritmética a mi rabia.
Yo siento el cielo como algo extraño, remoto, esto es, enemigo. Los cometas que, sin un objeto razonable, arrastran su cola por el infinito, no me dicen nada que me consuele. Las nebulosas, amontonamientos confusos de polvo cósmico, me exasperan como todas las cosas informes no terminadas. En lo que se refiere a los planetas y a los satélites, aduladores extintos que dan vueltas para obtener la limosna de un poco de luz, me causan repugnancia y despecho.
No comprendo a los astrónomos. ¿Cómo ninguno de ellos se vuelve loco o se suicida? Imagino que son hombres sin fantasías y sin dignidad, incapaces de sentir el insulto permanente de las constelaciones refugiadas en el fondo de los desiertos del espacio. Midiendo y calculando se ilusionan tal vez, pensando que dominan el cielo o al menos que son admitidos como huéspedes.
Pero el hombre verdadero no puede experimentar ante la vorágine esparcida de los fuegos viajeros, más que ira o terror.
El cielo tiene influencia sobre mí y yo no puedo tenerla nunca sobre él. Si le contemplo, me rebaja; si le ignoro, me castiga. Tiene una vida suya, misteriosa y solemne, que no consigo de ninguna manera turbar o mudar. Me inspira, contra mi voluntad, pensamientos mortificantes que me hacen daño, me deprimen y me quitan el valor de vivir.
Por eso prefiero no verlo. Me gustan las regiones y las estaciones donde el cielo está siempre cubierto, donde la noche es muda y total y te sientes bajo una colcha próxima de niebla familiar.
Envidio a los habitantes de Venus, porque, según se dice, su planeta está casi siempre envuelto por vapores. A ellos se les evita la vista del irritante chisporroteo de las inútiles constelaciones de aquella odiosa Vía Láctea que atraviesa el firmamento como una humareda de burla fosforescente.
Los poetas, idiotas como niños, se extasían ante las luciérnagas errantes del infinito. Para mí, que por fortuna o por desgracia no soy ni versificador ni místico, el cielo es únicamente el telón siniestro donde leo todas las noches la sentencia de mi nulidad irremediable.

Giovanni Papini

miércoles, agosto 17, 2005

Take the quiz: "Your Psych-Ward diagnosis"

Autism
Diagnosis: Autism. A developmental disability resulting from a neurological disorder that affects the normal functioning of the brain. It is characterized by the abnormal development of communication skills, social skills, and reasoning. Symptoms, which vary widely in severity, include impairment in social interaction, fixation on inanimate objects, inability to communicate normally, and resistance to changes in daily routine.

Drink

martes, agosto 16, 2005

Image hosted by Photobucket.com

Gira Nacional 'Máscara contra Cabellera'

lunes, agosto 15, 2005

Este evento forma parte de la gira nacional "Máscara contra Cabellera" que
encabezan algunas de las agrupaciones de rock del elenco. El arranque del
proyecto será en Guadalajara.

· Elenco: Víctimas del Doctor Cerebro, Ultrasónicas, Eufemia, Eva Lumbre,
Machin Gon, Rocamadre, Charaleska, y Zapata (se incluirá además un ring de
lucha libre y diez luchadores enmascarados para actuar entre grupo y grupo.

· Fecha: sábado 20 de agosto de 2005

· Horario: abren puertas a las 17:00 horas para realizar un
ritual chamánico
de purificación con el fin de que la gente conozca un poco más de la cultura
huichola; inicia el evento a las 18:00 horas y finaliza a las 24:00 horas

· Costo del boleto: pre venta $60.00, más un alimento no perecedero,
cobijas, artículos escolares y juguetes; día del evento $80.00 más un
artículo para los huicholes.

· La gradería de la Concha Acústica contará con una valla para delinear un
área especial para menores de edad. En dicha área se expenderán únicamente
refrescos y frituras. El área restante será para mayores de edad con
credencial para votar con el fin de poder expenderles cerveza.

· Favor de no llevar objetos contundentes, cinturones con
hebillas de metal
o cualquier otro articulo que ponga en riesgo la seguridad de los
asistentes.

Los artículos recaudados serán destinados a la Comunidad Huichola de la
Sierra de San Andrés. Este acopio se realiza en conjunto con AMITA, A. C.
(Asociación de Medicina Indígena y Terapias Alternativas, A. C.), cuyos
miembros constantemente realizan este tipo de eventos. Cabe mencionar que en
esta ocasión sería la primera vez que se hace a nivel masivo.

Y ahora

domingo, agosto 07, 2005

Una bonita canción: Animal, de las Eva Lumbre,

El juego en que andamos

Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta salud de saber que estamos muy enfermos,
esta dicha de andar tan infelices.
Si me dieran a elegir, yo elegiría
esta inocencia de no ser un inocente,
esta pureza en que ando por impuro.

Si me dieran a elegir, yo elegiría
este amor con que odio,
esta esperanza que come panes desesperados.

Aquí pasa, señores,
que me juego la muerte.
Juan Gelman
.

*

jueves, agosto 04, 2005

Image hosted by Photobucket.com
Seguro que al fin creeré que puedes controlar tu paz..

Porque sí..

miércoles, agosto 03, 2005

Perlita de occidente
(Pongamos que hablo de Leticia)

A mi me gusta, pero no me gusta tanto
Leticia, la alegre Leticia
Nunca vi su rostro pero siempre lo imaginaba
Como si de un rayito de sol saliera
Y hoy me ha dado por escribirle
Por que afuera llueve y la gente trae prisa
Por que acá tengo un corazón que la quiere
Por que es respuesta
Por que cultivo en ella gratitud
Por que es amistad, todos los pensamientos, toda risa,
Por que es fiesta en callado gozo y eso me gusta?

Puedo escribirle también
Los versos más tristes esta noche Pero mejor le pongo luz y colores?Quise venir vestido con colores carnaval y una máscara
A cantarle al oído: 'all you need is love'
Y dibujarle una sonrisa

Me gusta Leticia por que sueña
A veces sueña que se enfada y hasta que llora!
Pero la realidad siempre es otra
Leticia, la menuda Leticia
Escucha como el viento, me nombra galopando para llevarme lejos?
Perlita de occidente, no te me opaques nunca
Adorado dulce aroma,
Aroma dulce y dorado

'?De las tardes mi sol, del mar la brisa
Pongamos que hablo muchachos, de mi Leticia!...'

Gracias Candelas

.

lunes, agosto 01, 2005

Lo que se necesita es mantenerse en el nivel
de las experiencias ordinarias, sentir simplemente que
esto es una silla y aquello una mesa,
pero también, al mismo tiempo, que es un milagro: un éxtasis.

Virginia Woolf, Al faro